El atractivo libro de 235 páginas es un documento puesto al interés no solo de los amigos de la institución, de las católicos, sino de toda la comunidad de este norte fueguino que puede apreciar testimoniado el diario hacer de aquellas primeras tres mujeres: Rosa Masobio, Rosa Gutiérrez y Ángela Vallese, como superiora, que con las que siguieron desarrollaron un trato humanitario con las nativas alojadas en el establecimiento salesiano.
El período comprendido va de 1895 ha 1916, y cubre aspectos hoy no registrados en las Crónicas de los Salesianos (varones), que perdieron sus cuadernos en el incendio del 12 de diciembre de 1896, siniestro que condicionó la mudanza al Cañadón de la Porotera -tercer destino- donde hoy existe con sus viejas construcciones como Monumento Histórico Nacional.
"Hay momentos intensos, descriptivos, relatos esquemáticos, lagunas. Hay tragedias y simples alegrías cotidianas, costumbres de indígenas y religiosos, pasajes de viajeros célebres e ignorados. Fluir de la vida... de una vida llena de vidas y también de muertes arrancadas a la vida".
Las reflexiones de las hermana Fernández son motivadoras a una lectura que deberá ser detenida, tal vez invitando el libro a ser apreciado grupalmente disparando el diálogo sobre todo lo que lo cotidiano encierra de trascendente.
El libro, en sus anexos, trae una relación histórico-personal de cada protagonistas de la acción misionera en el período de 21 años que es presentado, listado de actas bautismales, matrimonios y defunciones.
Su edición dada en septiembre del año pasado lleva a pensar sobre la necesidad de una tarea similar con las Crónicas de la Misión, escritas desde el sector masculino.
Con letra de mujer se pude adquirir en la portería del Instituto María Auxiliadora de Río Grande al precio de $ 160.
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