LUJAN MUÑIZ y sus 60 años riograndenses.


El flaco me encontró en momentos en que andaba pagando algunas trampas. Me preguntó si había ido a la Feria del Libro, y como lo dije que todavía no lo había hecho, me recomendó que mirara una recopilación documental que había hecho sobre Quino, cosa que había dejado para que la gente lo apreciara.
Luján tiene 74 y de pronto sentí que si los amigos de Mafalda hubieran podido crecer, contrariando los códigos de la historieta, el indudablemente hubiera sido una suerte de Felipe.., maduro.
Ya para entonces Muñiz me recordó que hoy se cumplían 60 años de su llegada a Río Grande le dije. -¡Bienvenido a Tierra del Fuego!. Y me devolvió la sonrisa.
Lujan vino de su San Julián natal cuando tenía 14 años y con el mes de Septiembre comenzaba el ciclo escolar en la Misión, su destino –si era constante- podría ser Mayordomo Rural, estudios agropecuarios, útiles en la Patagonia de siempre. El vuelo lo dejaría en la pista, que por entonces operaba en la margen sur, al lado del Frigorífico CAP, y de allí lo traería al pueblo el Checo Bares,
Inauguró una larga residencia entre los salesianos. Fue alumnos y cuando terminó fue enganchado para tareas de secretariado. Interrumpió esa tarea para el servicio militar, que lo devolvió a Santa Cruz por un año.
Fue testigo del nacimiento de la radio del colegio, la primer radio del pueblo, y para entonces ya era un fotógrafo esmerado, incluyendo como correspondía las técnicas de revelado y copiado.
En la emisora fue operador y con esa profesión se incorporaría a Radio Nacional en 1973, la primera radio había hecho escuela en él y en Daniel Pisano, un alumno del establecimiento, de quien ha dicho –para evitar disputas- aprendió todo lo poco que sabía en materia radiofónica.
Por entonces era nervio motor del radio club de la localidad, y transitaba en una citroen de entonces que llevaba pintado en su fuselaje la la palabra ENTERPRAIS, cosa que habla de su humor y al mismo tiempo de los entretenimientos televisivos de aquella hora, para el caso VIAJE A LAS ESTRELLAS.
Yo comencé a conocerlo un poco más cuando ingresé a la emisora en 1977, ra operador, pero mientras operaba hacía la programación del día siguiente; atendía la administración, ante frecuentes licencias del personal de ese sector, y armaba las encomiendas de cintas y la caja del MAIL, que era de madera. No recibía ninguna remuneración adicional, solamente sumaba algunos francos de hacer guardias los domingos, y cuando sumaba algunos desde la dirección  -viendo que mucho del trabajo estaba adelantado- se los devolvían compulsivamente.
Tal vez por eso hubo un momento en que debiendo pesar en una oferta para hacerse cargo de la secretaria de la EAS –Escuela Agrotécnica Salesiana- donde era administrativo a medio turno, o la radio en la cual volcaba todo su entusiasmo.., se quedó con la primera opción. Era un tiempo en que formó su familia, casándose con la hermana del Director y dando lugar al nacimiento de los niños Muñiz-Iannaccio.

Allí lo visitamos cuando vivían en lo alto del cerro, vecino al gallinero, venía ordenando sus colecciones –porque Luján Muñiz tenía siempre de todos- y en algunos momentos en que a las aves de corral, que eran cientos, se les daba por días, se colocaba auriculares o subía el volumen de algún viejo disco en 78.
La discoteca histórica de la radio tiene rastros de su humor, algunas dedicatorias, en variadas caligrafías, fueron escritas por él, con dedicatorias que sorprenden a las nuevas generaciones.
Y llegó un tiempo de cambios, parecía mentira pero Luján se venía para el pueblo. De esos años recuerdo su primer domicilio en Chacra, en la calle Goytrisolo, y su mudanza posterior a Chacra…IV. Su aparición como coleccionistas, su concurrencia a la radio en momentos vitales, su necesidad de ir sumando años para lograr una jubilación, del lado de la Misión los papeles de aportes no habían sido del todo ordenados, y su desempeño en el Concejo Deliberante. Era el primer cuerpo de ediles que ejerció el poder por cuatro años, y allí trabajó bajo la tutela de Eugenio EL CHANO Santomé, que también venía del tronco aquel de La Candelaria, donde fue pupilo. Lujar ordenaba informaciones sobre el quehacer deliberativo, trabajaba artesanalmente con la computadora y recolectaba así la dispersa información periodística, luego todo eso se anillaba.., ¿en que habrá quedado toda su documentación? Porque después de él nadie siguió en la tarea.
Terminó aquel mandato de concejales y anduvo su tiempo a la espera. Un día se le dio incorporarse a la Biblioteca del Vecino, que llevó el nombre –homenaje en vida- de Leonor María Piñero.., allí hasta que se jubiló.
Con su gorra de cuero orejona transita nuestras renovadas calles, y se detiene a conversar con quien se da por conocido. Un tiempo aprendió piano, para que los dedos luchen mejor con las deformaciones de la artritis, otro se animó a nadar, y con ello su concurrencia al natatorio Eva Perón fue estricta.
En la radio fue apareciendo de a poco para hacer realidad una muestra histórica que finalmente se frustró a no prosperar acuerdos con el Museo Municipal.
Luján me contó historias a los que luego le di forma literaria, está como personaje secundario en el primer relato de LA CANDELARIA, mi primer libro, cosa que pueden encontrar en este mismo blog.

Todo esto escrito así de sopetón, junto a buenos días que nos encontró con Lujan, y la vida –nuestra vida- que sigue transitando en él. 


La foto en blanco y negro lo muestra por los 60, con el padre Miguel Bounicelli.

7 comentarios:

lalo eceiza dijo...

Que bueno lo que escribiste,un merecido reconocimiento a una gran persona que tuve el placer de conocer.soy de San julian y ex alumno de la Misión,Todo es como lo describiste,cuando leí la nota se me venían todos los recuerdos ,como si yo fuera testigo de todo lo que vos narrabas.Fui contemporáneo de lujan en mi época de alumno y también de chico( 6 años) cuando se estaba fundando radio Misión Salesiana y mi Papa (Luis Eceiza)que era técnico de radio y también vivía en la misión ayudaba a que la radio de sus primeros pasos.Un abrazo para lujan desde su pueblo natal.

Juan Andres dijo...

Grande Lujan !!!!!!!

Unknown dijo...

Lo llegue a tratar, gran tipo! Ingrese a la es allá por el 83', aun cuando todavía conducía su relault! Y el cura Ellero, era el director. Luego retomó Bonucelli con un poco mas de canas... Saludos a todos los queridos "chacareros de la EAS", Marcos Rizzi

Unknown dijo...

Lo llegue a tratar, gran tipo! Ingrese a la es allá por el 83', aun cuando todavía conducía su relault! Y el cura Ellero, era el director. Luego retomó Bonucelli con un poco mas de canas... Saludos a todos los queridos "chacareros de la EAS", Marcos Rizzi

Unknown dijo...

Lo llegue a tratar, gran tipo! Ingrese a la es allá por el 83', aun cuando todavía conducía su relault! Y el cura Ellero, era el director. Luego retomó Bonucelli con un poco mas de canas... Saludos a todos los queridos "chacareros de la EAS", Marcos Rizzi

nohry fueyo dijo...

...NOHRY FUEYO: ...si se fue en el 50 tuve que haberlo conocido....¿de qué familia MUÑIZ es?





Anónimo dijo...

Un saludo, Mingo, a vos en primer lugar y agradecerte por este espacio que generás a diario, en el que en algún momento nos toca apreciar tu relato desde muy cerca, como es este caso.
Yo estoy feliz de ver al flaco Luján, en esa foto actual que muestra a través de su mirada y su sonrisa, esa calidad de persona que es y que fue siempre. Lo aprecio mucho al flaco, desde los años en que nos conocimos allá por la década del 60 y principios del 70 cuando fui alumno de la Misión. El flaco es de esas personas absolutamente queribles y entrañables, que uno se alegra volver a verlas en algún momento. Hace años que no lo veía, por eso mi contento.
Flaco Luján, querido, te mando un gran abrazo!! Que Dios te bendiga a vos y a tu familia toda. Ojalá algún día pueda darte un abrazo en persona.
Con todo mi afecto
Carlos Salamanca

PD: a Nohry Fueyo que pregunta ¿de qué familia Muñíz es el flaco?. Él es Luján Muñíz Walker, por ahí te ayuda a reconocerlo. Un abrazo.