Roberts es el patriarca de una gran familia de múltiples apellidos
insertados a la vida fueguina, y no hemos conseguido que su nombre sea escrito
correctamente en la calle que lo recuerda.., pero tal vez la solución venga
después de esto.
Inspiró la obra de algunos escritores de renombre, como Andrés Rivera,
que puso aspectos fantásticos sobre su accionar, Maggiori se ajusta a la verdad
de los documentos que estando dispersos el unió con prolijidad..
Entre las fotos hay una de Milton y su esposa, tomada en dependencias
del Juzgado de Paz que se construyó en Río Grande por gestión suya, y que
constituye un ícono relevante de la arquitectura de época, la misma fue
suministrada por su nieta Susana Gladys Roberts.
Página 123. De
Milton Roberts relatábamos que había nacido en 1889 en Liverpool, Inglaterra.
Luego de trabajar como reportero en Nueva York y conocer y aprender del
detective Pinkerton- famoso policía privado de los banqueros norteamericanos
que dio origen a la agencia de detectives que lleva su apellido-, algún tiempo
después Roberts tomaba la decisión de viajar a la Argentina junto a sus padres
y hermanos. Era 1898 y apenas tenía 18 años, pero con los conocimientos ya
adquiridos y con la experiencia de campo que forjaría en la Patagonia, estaba
determinado que tenía por delante un futuro promisorio. Durante un tiempo fue
empleado de una compañía minera que cateaba los terrenos fronterizos en los
Territorios del Sur. Luego fue contratado por la Comisión de Límites que
dirigía el Perito Moreno. En el año 1905 fue convocado por el gobernador Lezana
para que colabore en el Censo Nacional que estaba por ejecutarse. En 1906,
decidido a no dejar perder sus conocimientos como “cazador de pistoleros”, se
alistó a las incipientes fuerzas de la Policía Territorial del Chubut. Cuando
la Policía Fronteriza fue creada, el debió incorporarse al plantel. Su actitud
caballeresca y profesional, pero por sobre todo su experiencia previa le
sirvieron para apartarse de los abusos y no involucrarse en las intrigas y
actitudes rayanas en lo delictivo de muchos de sus compañeros de oficio.
Roberts estaba casado con Ana Ellis, una galesa que conoció en la misma Colonia
16 de Octubre, mientras desempeñaba sus funciones. Ella era sobrina de Owen
Williams, uno de los primeros maestros
de la Colonia. Mientras, Lucio Ramos Otero acusaba a “La Fronteriza” de
no hacer nada para probar su secuestro y robo, mientras el expediente judicial
de la causa lentamente engrosaba con las declaraciones hasta alcanzar más de
700 fojas. Para enero del año 1917 los vecinos de la colonia 16 de Octubre y
Esquel elevaban una nota a las autoridades destacando la buena conducta y
procedimientos con que Roberts ejercía hasta entonces sus funciones. Mientras
tanto el Comisario continuaba persiguiendo cuatreros y bandoleros que se
refugiaban en los contrafuertes de la cordillera.
Página 125. .. ese
mismo año (1918) un horrible crimen había conmovido a los pobladores del Genoa
y los alrededores. Se trataba del salvaje asesinato cometido contra los esposos
Córdoba. Españoles que se habían asentado en el valle desde 1907. (Anota el
autor: Este matrimonio de inmigrantes tenía su población entre los cascos
actuales de las estancias “El chalet” y “La Cristina”, en los alrededores de
Gobernador Costa.)
Todo sucedió en la
noche del 7 de octubre de 1918 y le correspondería –una vez más- al comisario
Roberts resolver el caso con eficacia. Los esposos Córdoba como se
acostumbraba, esa noche recibieron generosamente a dos paisanos pasajeros
brindándoles comida y alojamiento. Unas pocas horas más tarde volvieron a
golpear la puerta y era otro desconocido, que fue también gentilmente invitado
a pasar, fingiendo no conocer a los presentes. Pero cuando se encontraban ya de
sobremesa, a la señal de uno de ellos se pusieron de pie y desenvainando sus
cuchillos apuñalaron a los indefensos y sorprendidos dueños de casa. Los
vejámenes y ensañamiento se hicieron evidentes cuando la policía halló al otro
día secciones del cuerpo de la mujer atados al palenque de la entrada del
negocio. Antes de huir revisaron toda la casa, llevándose mercadería y unos
10.000 pesos en efectivo. Una suma muy
considerable para la época, pero recordemos también que no existían bancos y
los comerciantes en algún lugar debían esconder su dinero. Enseguida Milton
Roberts organizó la pesquisa y el seguimiento. Las huellas todavía visibles lo
llevaron hacia el lago General Paz debiendo internarse en la zona boscosa, es
decir casi en territorio chileno. Allí logró alcanzarlos y sorprenderlos. Antes
de ser capturados los asesinos se defendieron a tiros. Se trataba de José
Rosario Rodríguez, su hijo Domingo Rodríguez y un tal Gamaniel Luna, todos de
nacionalidad chilena. Cuando el tiroteo era intenso, al verse acorralado
Gamaniel Luna intentó suicidarse, pero su brazo destrozado de un balazo por la
partida de Roberts no le respondió. Luego el juez Letrado del Chubut, Dr.
Armando de Barelli dictaría una sentencia de condenatoria de 25 años para los
Rodríguez, mientras Gamaniel Luna fallecería en prisión. Domingo Rodríguez
lograría evadirse en 1925 de la Penitenciaría Nacional junto a otros presos
peligrosos, pero luego fue vuelto a capturar en Santa Cruz.
Página 141… En abril
de 1923 el abogado Lorenzo Amaya se había comunicado por carta con Milton
Roberts –que en ese momento cumplía funciones en Leleque- informándole que el
ministro del interior lo designaba como Comisario Inspector del Chubut. Esta
designación motivó a varios destacados pobladores a expresar su apoyo en
diarios regionales y capitalinos, muchos de ellos le enviaron telegramas de
felicitaciones. En el año 1924 Roberts es destinado al Territorio de Santa
Cruz. Esto volvió a movilizar a los vecinos de Esquel, que elevaron una
petición con 250 firmas, oponiéndose al traslado y tratando de dejar sin efecto
la medida. Asimismo se enviaron notas a
los diarios La Nación, La Prensa y La Razón. Pero el ministro Vicente Gallo
desoyó los reclamos y Roberts tuvo que aceptar resignado su nuevo destino. Hubo
una primera cena de despedida que se realizó en Leleque. A ella concurrieron
algunos estancieros del lugar, unos pocos compañeros de la fuerza y habló el
señor Albornoz expresándole el
agradecimiento de los vecinos y lamentando su próxima ausencia.
En Santa Cruz
Roberts reemplazaría al comisario Ricardo Carranza, que no había podido cumplir
con el objetivo de disciplinar a los policías destacados en las zonas
fronterizas, provocando una protesta generalizada, a la que antes hacía
referencia. Las protestas habían obligado a la jefatura de policía a enviar
comisarios encargados de recorrer la campaña para recoger testimonios y
levantar las denuncias necesarias. El segundo banquete de despedida de Roberts
fue organizada en Esquel. Allí el número de concurrentes fue mucho más alto. En
el acto hicieron uso de la palabra los señores Saúl Luque, Evan John Roberts,
Dr. Roggero y Ángel Moré.
Página 142… En el
año 1924, mientras Milton Roberts ya ocupaba elcargo en Santa Cruz, realizó una
breve visita a sus amigos de Cholila para despedirse de ellos. Estando en la casa
del poblador Sixto Jeréz escuchó los reclamos de su mujer para que se ocupe de
averigur el paradero de uno de sus hijos, Eustaquio Jerez, cuyas últimas
noticias habían sido desde Lago Buenos Aires. Y del que luego su familia ya no
se supo mnada más. Ni bien Roberts estuvo instalado en Río Gallegos emprendió
una primera gira de inspección en compañía del policía Alejandro Ferrer. Cuando
llegó al destacamento más cercano al lago, que estaba a cargo del comisario
Juan Izzo, logró movilizar el personal para que establecieran las primeras
averiguaciones al respecto. Si bien la policía ya sospechaba de las actividades
de un poblador de apellido Galván, no había pruebas contra él. No tardaron
mucho en encontrar en el campo que poblaba Damián Segundo Galván algunos
caballos que habían pertenecido a Jerez y cuya posesión no pudo justificar. En esos días y ante la novedad llegó un
hermano del desaparecido e interrogando a Galván vio aperos, una montura y
prendas que habían pertenecido a su hermano Sixto. En esos días Galván dio
versiones que se contradecían sobre el posible destino de Jerez. El hombre ya
no tendría escapatoria y lo sabía. Para mejor habían desaparecido por allí
mismo tres personas más, dos de ellas peones del mismo sospechoso. Un día
Galván cargó un carro y tratando de pasar desapercibido se fue de su morada en
dirección a Comodoro Rivadavia. Entonces Roberts comisionó al cabo Andrés
López para que lo siga y lo detenga.
López lo alcanzó en el paraje “Las Cortaderas”. Conducido a la Comisaría del lago
enseguida fue “interrogado” y no le quedó otra posibilidad que confesar.
Al otro día fue
conducido atado en un caballo al escenario de sus crímenes. Allí fue obligado a
desenterrar a sus víctimas. Luego se prestó voluntariamente a la reconstrucción
de los hechos.
Página 143… En enero
de 1922 Galván que había cedido un puesto para que Jerez lo ocupe
momentáneamente, lo había invitado a una fiesta que se celebraba en Balmaceda,
del otro lado de la frontera. Pero antes de llegar le descerrajó un tiro en la
cabeza y le asestó dos puñaladas. Le robó la tropilla, los objetos personales,
unos 1.200 pesos en efectivo, y un cheque por 4.000 pesos. Luego y como hizo
con cada una de sus víctimas, arrastró el cadáver con el caballo y lo ocultó
entre los montes. Al volver a su casa se encontró con que uno de sus peones
llamado Andrés Bonet le reclamaba los sueldos atrasados, en el mismo momento
Galván le dio muerte de un tiro y repitió la misma manera para esconder el
cuerpo. Lo mismo ocurrió con otro de sus peones que también reclamó haberes, se
llamaba Enrique Almonacid.
El mismo criminal
confesaría no mucho después que en junio de 1924 llegó a algunos arreglos con
un paisano llamado Manuel Vargas, que se ocupaba de fletar carga con un carro
que pertenecía al comerciante nativo Maliqueo. En algún momento ambos discuten
y Galván le disparó dos tiros, uno de ellos de atrás; habiéndolo luego
despojado de su ropa, dinero, caballos y chata. Con ese mismo carruaje
circulaba cuando fue detenido- El 21 de enero de 1926 el Juez Letrado de Río
Gallegos Dr. Jacinto R.Miranda,dictó sentencia para el cuádruple asesino.
Página 144…En esa
misma recorrida Roberts resolvió otro crimen que había sucedido en el
campamento Holdrich del Ferrocarril el día 15 de octubre de 1917. Se trataba
del asesinato del telegrafista Américo Albania, cometido por un sujeto conocido
como Juan Pancho, o como José Fernández, o Ramón Silva, O José Silva, alias
“Chicharra”, tal la lista de nombres falsos que utilizaba. Una vez identificado
y detenido, el asesino fue enviado al penal de Rawson, jurisdicción a la que
pertenecía la causa. Por estas destacadas actuaciones, Roberts fue homenajeado
nuevamente pero esta vez en Santa Cruz. El acto se realizó el 27 de febrero de
1926 en la jefatura de Policía de Río Gallegos. Esa vez concurrieron varios
vecinos de Lago Buenos Aires, que agradecidos le obsequiaron un diploma y una
medalla de oro. Se encontraban presentes el gobernador del Territorio, Dr.
Germán Vidal, varios funcionarios públicos y destacados vecinos de esa
localidad. Con los años para poder jubilarse Roberts tuvo que acumular
antecedentes y eso le hizo trabajar como empleado de la justicia de Tierra del
Fuego. Recién en el año 1948 pudo hacerlo. Desde entonces se radicó en Puerto
Deseado, donde pasó esa última etapa de su vida coleccionado algas marinas y
realizando cuadros con ellas. Una técnica y labor muy patagónica por cierto.
Muchas veces su colección fue expuesta y he visto fotos de ella en la revista
“Argentina Austral”.
Milton Roberts
falleció el 8 de julio de 1961 en Temperley, provincia de Buenos Aires. Tenía
81 años de edad. Sus restos fueron sepultados en el cementerio de Llavallol.
Ernesto Maggiori vende sus libros en la feria de El Bolsón, y vive
de esa producción. Además del libro que aquí mencionamos se puede conseguir Tecka, una aproximación histórica,
Resistencia social y casos de bandolerismo en Patagonia, Problemas limítrofes a
comienzos del siglo XX que casi provocan una guerra, Loas años de la Revolución
en Patagonia 1918 -1930, Consideraciones y reflexiones acerca de la historia de
los pueblos mapuche y tehuelche, Voces de un pasado todavía presente, Historias
de Fronera, policías, bandidos, baqueanos, arrieros.., entre otros.
2 comentarios:
Buenisimo tu resumen de esta persona que aporto tanto para la patagonia de aquellos tiempos tan bravos, lamentablemente los ignorantes de nuestra municipalidad, primero no saben quien fue y segundo por logica ignorancia tampoco saben escribit correctamente su apellido, aparte de cometer errores como abreviar con silabas el nombre, bastante poco apropiado e indicativo de la persona en cuestion..Un abrazo Mingo amigo.
Gracias hermoso
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