A principios de enero de 1889 se tomaba
noticia en Punta Arenas de Conversión de
25 de protestantes en Malvinas. La
novedad formaba parte tal vez del capítulo inesperado de los propósitos
misioneros de José Fagnano en su extensa Prefectura Apostólica.
Es que todos los intereses se centraban
en salir del Punta Arenas al contacto de los nativos fueguinos, amedrentados
por las primeras señales de la civilización.
Y para ello se contaba con la Isla Dawson donde se
pensaba levantar una primera misión que sirviera para cobijar a los indígenas
provenientes del territorio chileno.
El 2 de febrero de 1889 en medio de tareas de
embarque se suscitó un incidente que tendría derivaciones nominales para
nuestro Río Grande.
Fue cuando el padre Ferrero resultó
atacado por una vaca que, evidentemente, no quería embarcarse fácilmente a su
último destino salvando a apurar su carrera su integridad física, y tal vez su
vida.
El religioso creyó ver en su salvación
la intensección de la virgen en la festividad del día: de la Candelaria , Patrocinio
de la madre de Jesús.
Pero Fagnano ya tenía comprometido el
nombre de San Rafael para la fundación chilena, en homenaje al obispo de Ancud
con el que esperaba mantener buenas y mejores relaciones.
Pero eso sí, comprometió el uso del
nombre de La Candelaria ,
para la próxima fundación, que se pensaba erigir en territorio argentino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario